Uno es la unidad

Luna: mira los perritos

Gato: que no te gustaban los gatos??

Luna: los perros me gustan, pero los gatos me encantan

Gato: :$

Una noche, un dibujo y una carta

cosas que hacen perfecta la armonía con las estrellas,

sentimientos que corren con prisa

por los extensos pasillos del centro comercial,

y el despistado atardecer no los ve pasar,

los deja, imprudentemente, correr hacia mi;

lo hace para rescatarme de las frias caras y las duras palabras.

Las palabras describen poco;

los sentimientos abundan por entre las calles,

pero no todos son los correctos,

no todos te dicen que las estrellas son adornos preciosos,

que la Luna puede bajar a tu puerta y

mucho menos que los gatos pueden hablar con el corazón.

He aprendido que las fuerzas no son sufiencientes

cuando se quiere con el color de tus ojos,

cuando se escucha y se siente que te acarician las ideas,

cuando se trata e intenta de buscar algo mejor que lo perfecto;

soy prisionero de tus palabras...

arroja las llaves hacia el mar, y no dejes que las encuentren

para poder estar solos, aquí dentro...

entre arena y viento...

(Gato: vamos mas atrás

Luna: no, aqui esta bien

Mar: por que no le haces caso...)

Siento cada uno de tus pasos,

los veo dibujados en la arena,

trazando nuevas formas a nuestro destino,

nuevos comienzos sin finales;

sin embargo, la astucia

graba sobre mi frente

con rafagas de viento y sinceridad

historias que nunca crei posibles,

besos que nunca senti tan dulces,

sueños que nunca soñé.

Camino al compas de tus huellas,

las sigo de cerca para no perderme y talvez,

encontrar la diferencia

entre tu mano y las rosas,

entre tus besos y el dulce de los naranjos,

entre las huellas de un gato y la Luna...

Estas, siempre estas en mis sueños

Hoy la Luna vino hasta mi puerta,

la siento, aunque solo halla jugado en el jardin

dejando sobre el viento

la prestancia que implica

cada uno de sus cabellos.

Es cierto que no suele bajar,

que se entretiene jugando con las constelaciones,

construyendo sueños de la mano con las estrellas;

sin embargo, hoy la vi

jugando en el jardin,

quiza solo sean sueños,

estretegias que mi mente crea para estar

cerca a ella, para sentirla y que ella me sienta.

Hoy la Luna bajo a mi casa,

a mi mente, a mis sueños y

pense en lo perfecto,

en alguna otra palabra

que valla mas allá que ésta,

que vuele por praderas distantes,

tan distantes en las que solo pueda estar con ella

sentado,

al pie de un sueño o alguna esperanza,

esperando derrepente

tan solo una mirada suya,

algo que me haga entender

que lo perfecto puede superarse

si tan solo estoy junto a ella...

el mar...

Los dias conversan

sobre los granos de arena

que discurren injuriosamente

por entre nuestros dedos y tu cabello.

El agua transporta nuestros sueños,

los lleva al otro lado del mar

para mezclarlos

con el azul del firmamento;

mientras por la orilla de otros océanos

un titán juega con un trozo bañado de esperanza

lo lanza, como tratando de provar su furia,

su vitalidad, su fuerza;

sin embargo,

la arena y nuestros sueños

logran disuadir a aquella bestia

que aturdido,

comprendio lo singular de un sentimiento.

Lejos, muy lejos de aquel lúdico océano

me encuentro solo, descalzo

con la frente abierta hacia el cielo

esperando que tus ojos

me enseñen nuevamente el camino

hacia tus manos, tu pelo y tu nombre,

aquel nombre que las aguas

no se atreven a borrar con cada oleaje

sobre la arena...